Viernes 8 de marzo de 2019
En su tradicional discurso en casa Santa Marta el Papa Advirtió lo siguiente: "Pide al Señor fuerza y avanza humildemente con lo que puedas. Pero no te maquilles el alma, porque si maquillas tu alma, el Señor no te reconocerá".
Así el Santo Padre alentó a los fieles a pedir a Dios en el período de Cuaresma ser coherentes en nuestras vidas: "le pedimos al Señor la gracia de ser coherentes, de no ser vanidosos, de no aparentar más dignos de lo que somos. Pidamos esta gracia en esta Cuaresma: la coherencia entre lo formal y lo real, entre la realidad y las apariencias".
Además el Obispo de roma recordó la conducta del fariseo y el publicano descrita en el Evangelio para denunciar a quienes se sienten "justos" por pertenecer a tal asociación y sienten que no son como "aquellos pobres que no entienden nada" demostrando una enorme incoherencia entre sus palabras y los actos.
Por ello, el Pontífice remarcó que este tiempo que conduce a la Pascua puede ser una oportunidad para reconocer los errores ya que toda persona está tentada por las hipocresías.
Finalmente el Santo Padre afirma que quienes se dicen "cristianos, incluso católicos, que se llaman a sí mismos católicos practicantes" y explotan a sus trabajadores sin darles sus derechos, por ejemplo, a la jubilación. "Y muchos de estos se dicen católicos y van a Misa los domingos, pero lo hacen. ¡Este es un pecado mortal!", finalizó el Papa.
