Sábado 19 de mayo de 2018
El último día de la fiesta de las Chozas, que era el más solemne, Jesús, poniéndose de pie, exclamó: «El que tenga sed, venga a mí; y beba el que cree en mí». Como dice la Escritura: «De sus entrañas brotarán manantiales de agua viva». Él se refería al Espíritu que debían recibir los que creyeran en Él. Porque el Espíritu no había sido dado todavía, ya que Jesús aún no había sido glorificado.
Palabra del Señor