Lunes 12 de julio de 2021
El Papa sigue hospitalizado en el Hospital Universitario Policlínico Agostino Gemelli de Roma, y desde allí rezó a la Madre del cielo, asomado desde el balcón de su habitación situada en la décima planta del hospital, junto a algunos niños que se encuentran también ingresados.
Sobre el Evangelio hodierno, Francisco explicó que San Marcos habla de como los discípulos de Jesús, enviados por Él, ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban.
El Santo Padre indicó que este aceite es también la escucha, la cercanía, la atención, la ternura de quien cuida a la persona enferma: “es como una caricia que hace que nos sintamos mejor, que calma el dolor y anima”, subrayó.